Toda mi vida he querido “darme un paseíto” por París y conocer la Torre Eiffel, tomas café y comer croissant, los cuales adoro. Pero París es mucho más que la ciudad del amor, es un lugar lleno de historia. En cada esquina hay un monumento, una edificación, una parte de la historia de Francia y me gustaría darles a conocer algunos aspectos sobre esta.
· Notre-Dame: Está situada en la isla de Cité en París, es de las más antiguas catedrales de estilo gótico en Francia. Se empezó a construir en 1163 y se terminó en 1345, duró 182 años en construirse por completo. En ese mismo terreno los celtas habían celebrado aquí sus ceremonias donde, más tarde, los romanos erigirían un templo de devoción al dios Júpiter. También en este local existió la primera iglesia cristiana en París, la Basílica de Saint-Etienne. Enrique VI de Inglaterra y Napoleón Bonaparte fueron coronados allí, Juana de arco fue beatificada allí y Louis Vierne, gran organista que ocupo Notre-Dame entre 1900 y 1937, muere allí.
· La opera de París: Fue fundada en París por Luis XIV en 1669 con el nombre de Académie Royale de Musique. Ha cambiado 15 veces de nombre.
· Palacio de Versalles: Luis IV invirtió más de la mitad de los ingresos de todo un año del país para convertir la sencilla casa en un palacio digno de la realeza. Durante los reinados de Luis XV y Luis XVI, Versalles sufrió poco a poco cambios que afectaron su majestuosidad. Después de la Revolución Francesa, el Palacio de Versalles fue saqueado y ya casi no fue utilizado, salvo en ocasiones especiales como la coronación del emperador alemán en 1871 o la firma del Tratado de Versalles en 1919. Cabe destacar que fue en este lugar donde la famosa y emblemática María Antonieta de Austria vivió luego de su casamiento con Luis XVI, tuvo sus hijos, fue encarcelada y luego degollada.
· Juana de arco: Quizás muchos no la conozcan pero este personaje juega un papel importante en la historia de Francia. Juana de arco fue una heroína, militar y santa francesa que convenció al rey Carlos VII de que expulsara a los ingleses y este la colocó sobre su ejército.
· Arco del triunfo: Napoleón Bonaparte decidió construir este arco tras su victoria en la Batalla de Austerlitz (1805), tras prometer a sus hombres: «Volveréis a casa bajo arcos triunfales». A sus pies se encuentra la Tumba al Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial, en cuya superficie hay una inscripción: ICI REPOSE UN SOLDAT FRANÇAIS MORT POUR LA PATRIE 1914-1918 («Aquí yace un soldado francés muerto por la Patria 1914–1918»)
· Torre Eiffel: diseñada por el ingeniero francés Gustave Eiffel y sus colaboradores para la Exposición universal de 1889 en París. Tiene una altura total de 324 metros.
Estos y muchos más son los legados históricos tangibles que podemos observar si tenemos la oportunidad de visitar París. Elementos arquitectónicos que forman parte de la vida de los parisienses y que muchas veces pasan inadvertidos por los turistas. No seas otro turista que solo ve, obsérvalo bien que lo que esta ante tus ojos tiene una gran valor histórico para el país que visitas.
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